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miércoles, 27 de septiembre de 2017

Lo que veo

Llega la noche, el manto oscuro cae, el verano se va acabando pero aún hace una temperatura agradable… hay una brisa suave, con matices y olores de espuma del mar. Me siento en mi tumbona que tengo en la terraza de arriba y luego me acuesto en ella, cierro los ojos y respiro profundamente, en cada aliento que suelto, mi cuerpo se relaja, mis oídos cansados de escuchar el estrés del día, también se calman y empiezo a oír los sonidos de la naturaleza, silencios y algunas aves que se acicalan junto a la ría.

Entonces abro los ojos, no veo nada, pero cuando pasan unos minutos empiezan a aparecer unos puntitos plateados, unos más grandes, otros más pequeños, algunos parpadean y varios están fijos en el cielo; conforme pasa el tiempo todo se llena de estrellas, y con ellas aparece un nuevo mundo, que es tan anciano como el propio universo. Cada una de estas, son las respuestas que el hombre se pregunta desde siempre, pero que ha olvidado hace ya tiempo…

¡Qué genialidad, qué maravilla!, entender lo que es realmente la vida, las soluciones están ahí, arriba colgadas, pero parece que ya nadie les echa cuenta. Navegar por el cosmos a gran velocidad, un pequeño planeta dentro del sistema solar, que a su vez está dentro de la vía láctea, que es nuestra galaxia, con millones de estrellas y planetas; junto a ella otras galaxias como la de Andrómeda y otras muchas más para formar cúmulos y si seguimos más allá, estas forman supercúmulos, como el de Virgo, donde estamos nosotros. Aún, más lejos, estas estructuras se siguen agrupando hasta formar una verdadera red de millones y millones de galaxias… ¡es impresionante!, ¿verdad?, cuánta vida habrá repartida por todo el universo.

Cierro los ojos y me imagino navegar por el espacio, asombrarme como en las fotos del telescopio Hubble, de los colores, brillos, nubes y formas que puedo llegar a visitar con la imaginación… entonces mi boca simula una sonrisa… y escucho la risa de un niño, que no solo está ahí arriba, pues en realidad nunca se marchó, él está en mi interior, aún vive conmigo.

La alegría me invade y vienen muchos recuerdos, siempre corriendo, saltando, preguntando sobre las cosas que veía… una chispa inagotable, que poseía el don del conocimiento verdadero. Sin normas, sin restricciones, solo las ganas de aprender y disfrutar, de compartir y ayudar, de ser vida y donársela a los demás…

Esto es todo lo que veo cuando me tumbo en una noche estrellada, vuelve a mí ese muchacho que un día fue expulsado para entrar en el mundo de los mayores, un lugar limitado, triste y rutinario… no quiero volver allí, no me gusta, prefiero seguir siendo pequeño, porque la vida tiene muchos colores y la verdad no se cubre con un velo de hipocresía y miedo a la realidad. Ese niño es tan grande como el universo, una fuente inagotable de sorpresas y aprendizajes, que cuelga de la inmensidad de las estrellas.

He comprendido que nunca tuvo que marcharse, no era necesario, por eso, ahora vuelvo poco a poco a recuperarlo, vuelvo a oír su risa y yo a su vez suelto una carcajada, pues el problema no es hacerse mayor, no hay nada de malo en eso, el inconveniente es olvidarse de quien es uno, pues primero fui niño y luego llegué a ser adulto, entonces lo esencial, la base nunca debe eliminarse, pues es nuestra infancia, la que determinará el camino de nuestra vida.

En el mundo de los adultos, me he ido endureciendo poco a poco, siempre quejándome, pues hay mucha maldad e injusticia, pero aunque esto sea así, a partir de ahora todo será diferente, pues es el crío que hay en mí, el que quiero que lleve mi vida, la sonrisa perdida, y que como un tonto dejé tirada. Escúchame bien, a partir de ahora mi afán, no será otro que reencontrarme con la alegría que habita dentro de mi cuerpo y que estaba enterrada; todo será diferente, porque tendré lo bueno de ser adulto y lo mejor de un niño.

Así recuperaré la paz perdida y podré seguir creciendo como persona, hasta el día en que me toque partir solo de la mano, junto a este muchacho, mientras bromeo con él y subo hacia las estrellas… 

Abro los ojos y me parece un pensamiento precioso, mientras me sigo adentrado en la noche y buscando nuevos destellos en mi vida, sin olvidar nunca, que el mayor regalo de mi vida, está ahora aquí, a mi lado, en la misma tumbona, pues su corazón late por mí y yo por el suyo… le tomo de la mano y siento que todo es genial, pues es el centro de mi galaxia, aquí seguiremos toda la noche sonriendo como niños, bajo los atentos ojos de las curiosas estrellas...

miércoles, 20 de septiembre de 2017

Esperar

El hecho de que la vida esté en constante movimiento y el ser humano tenga el tiempo muy contado, sin saber con certeza cuánto exactamente, le hace vivir de una manera frenética, y muchas veces casi sin pensar en lo que está haciendo, si le conviene o si es positivo para él.

Y aunque yo siempre en esta vida invito a actuar de una forma activa y acuciante, debido a los cambios que debemos realizar para nuestro beneficio personal, la sociedad y el planeta que sufre en general, también es cierto, que no siempre tenemos que proceder de la misma manera, bien porque a veces no podemos o no sabemos por dónde tirar en una situación concreta.

Por eso, hay momentos en los que simplemente hay que relajarse y esperar, pues en ocasiones llegamos a un muro infranqueable que por mucho que lo intentemos, no nos va a dejar pasar, o después de haber hecho todo lo posible con un problema, no sabemos que podemos seguir haciendo para solventarlo. Esto produce un sufrimiento y una impotencia, que sinceramente no lleva a nada bueno y aunque la preocupación te está pisando los talones, no por eso, vas a llegar a resolver todo más rápido, es hora de aguardar un cambio de vientos que sean más favorables.

Entonces, como decía, en estas situaciones lo único que queda es sentarse y esperar… - ¿esperar? -, sí, - ¿cómo te puedes quedar quieto mientras una ola gigante avanza hacia a ti? -, ¿parece ilógico verdad?, pues cuando seas capaz de aquietar tu mente, tu cuerpo, relajarte y dejes el tiempo simplemente pasar, sin más propósito que el de agotar tu existencia si hiciera falta, sin miedo a nada, comprenderás que nuevas oportunidades volverán a surgir, inéditas respuestas saciarán tantas preguntas.

Todo esto es necesario porque no sabemos escuchar, no sabemos atender a lo esencial de las cosas, no vemos más allá de lo evidente y por supuesto no llegamos a entender en sí, nuestro significado como seres que existen. Siempre nos vamos a los extremos, complicamos las cosas más sencillas y pervertimos las preguntas más importantes, negando la realidad más lógica.

¿Sabes?, si miráramos más al cielo (y no me refiero a pensar en ningún dios precisamente), si aprendiéramos a focalizar la luz del sol, de la luna y el brillo de las estrellas en la oscuridad insondable de la noche… si fuéramos capaces de captar como un telescopio o un radar, todo lo que el universo nos transmite, aun sabiendo tan poco de él, te aseguro que seriamos mucho más sabios y reinaría en nosotros ese sentido común, que poco se encuentra ya entre los hombres; pues este entendimiento no tiene por qué radicar en su conocimiento científico, estoy hablando de algo distinto, de algo mucho más profundo, que todo ser vivo, por el hecho de estarlo, puede sentir esta conexión con el cosmos.

Porque cuando piensas con esta mentalidad, todo lo que ocurre en tu vida está por debajo, aunque no por eso deja de ser importante, con esto lo quiero decirte, es que la mitad de los problemas que tienes, en realidad son tonterías, banalidades y estupideces. De la otra mitad, más de un veinticinco por ciento tiene fácil solución y solo la última mitad de todo esto, se pueden considerar contrariedades dignas de prestarle atención.

¿Qué ocurre?, que si mezclas todo esto dicho anteriormente no puedes reaccionar, demasiado ruido en tu cabeza y para colmo, no paramos ni un momento con tanto estrés, vamos por la vida agobiados, pegando patadas y siendo esclavos de todo el que tiene dinero… qué absurdo, ¿te merece la pena?.

Ten siempre la cabeza en su sitio, que no significa hacer lo que hacen los demás, más bien es al contrario y cuando entiendas que formas parte del universo y este de ti, que sois la misma materia y que hasta tú finalidad es la misma; empezarás a ver la realidad, a desechar tantas tonterías de las que se rodea el ser humano, comenzarás a apreciar toda clase de vida, te sentirás más tranquil@ y más alegre. Las decisiones serán más fáciles de tomar, comprendiendo que no puedes cambiarlo todo, pero si puedes mejorarlo, iniciar una diferencia, para ordenar tu vida y la de los demás, aquellos que quieran escucharte y que sus vidas anden patas arriba.

Al igual que es una locura andar en una casa a oscuras y que no conoces, pues acabarás herido o muerto, si en tu vida se ha levantado una densa niebla, o una tiniebla escalofriante, amig@ lo mejor es que no te muevas, pues acabarás aún más perdido, espera… tranquilo… ¡no te muevas…ten paciencia!, espera… deja que se disipe la confusión, observa a tu alrededor, siente de una manera distinta, que te permita ver lo que era invisible y seguir tu camino tomando la decisión más acertada, aunque eso te tome un tiempo de tu vida, que te parezca desperdiciado. 

Todo esto y mucho más puedes llegar a alcanzar, por el mero hecho de saber esperar en ciertos momentos, algo tan complicado para el mundo actual y que se ha convertido en una necesidad básica, pues lo que te digo no es filosofar por filosofar, esto algo muy serio e importante, porque tu felicidad y la de los tuyos, depende de la capacidad que adquieras… para entender, que solo a veces cuando uno se detiene, es cuando realmente comienza a andar.

miércoles, 13 de septiembre de 2017

Hipersexualizados

Hace tiempo que vivimos en un mundo en donde el tema referente a la sexualidad y en concreto al sexo, está aumentando de una manera preocupante, hasta llegar a la perdida de nuestra propia imagen. Me explico, hemos pasado desde siglos posteriores hasta hace treinta años más o menos (y en los pueblo aun peor), en donde todo esto era algo tabú, una represión enorme por parte de las religiones y gobiernos, que fustigaban la mentalidad de las personas, con la culpabilidad del pecado y que prohibía la libertad para vivir la sexualidad de una manera abierta y sana para todos, rebajando a la mínima expresión algo tan importante y placentero como el sexo, enterrándolo en un agujero sucio, una herramienta únicamente válida para tener hijos, todo lo que se saliera de ahí, era malo y perjudicial, y por tanto había que perseguirlo. Esto generaba una serie de represiones, frustraciones y obsesiones en tantas personas, que muchos caían presos de un uso patológico de él, por culpa de tener que vivir a escondidas todas estas cosas.

De ahí, hemos ido avanzando, recuperando mucho terreno devastado por las iglesias, estados y religiones en general, hasta nuestra época actual, en donde en las naciones del primer mundo, cualquier persona puede disfrutar de la sexualidad, de la mejor manera que quiera, sin miedos, prohibición o rechazos, ya seas heterosexual, homosexual, transexual, etc.

Todo esto es genial, pues la sexualidad es algo muy importante en nuestras vidas, ya que abarca, yo diría, que todas las facetas del ser humano; disfrutar del sexo es algo realmente necesario e impresionante, que proporciona salud y una estabilidad mental equilibrada en las personas. 

Pero a medida que recorremos este camino y sobre todo con el crecimiento de la audiencia televisiva e internet y todas sus posibilidades (desde buscar amistades, ligues, amores o la simple visualización de pornografía), se está haciendo un mal uso y de manera exagerada de estos temas. Se focaliza y aísla el sexo, como algo que hay que tener presente las veinticuatro horas del día, por eso, la programación televisiva nos bombardea diariamente con programas y anuncios repletos de mensajes subliminales o directísimos sobre este; vamos, que hasta para venderte un detergente, te montan una escenita que nada tiene que ver con el producto, así supuestamente, este se vuelve más atractivo, queda retenido en nuestra mente y tiene más probabilidad de que lo compremos.

Yo creo que la figura de la mujer, está especialmente sobreexplotada, de tal manera, que pienso que llega a ser perjudicial para nosotros, pues la sexualidad es mucho más que el sexo, y cuando empezamos a ver a los demás solo como objetos de deseo, algo de usar y tirar, todo se banaliza y reducimos a un hombre o a una mujer a un juguete que no tiene sentimientos, o una historia maravillosa detrás.

Con esto no digo que el sexo tiene siempre que hacerse con amor (aunque yo lo prefiera), para nada, pero hay un paso muy grande de tener una libertad sexual, gran cantidad de información para disfrutarla y pasarla a nuestros jóvenes, a llegar distorsionar algo tan importante como la sexualidad, y al final reducirlo todo, dicho vulgarmente, a un polvete con alguien, de la que ni siquiera me acuerdo, ni donde la dejé. Si te das cuenta, llegamos a algo muy parecido, de lo que comentaba antes, desde siglos atrás, pues en muchas personas se generan estas obsesiones y patologías descontroladas, que llegan a dominar su vida, la única diferencia, es que antiguamente no había libertad (bueno no en todas las civilizaciones) y ahora sí.

Esto es algo que la OMS llama impulso sexual excesivo, un trastorno tan extendido hoy en día, que esta organización lo considera un problema grave de salud física y mental. 

Por eso debemos tener cuidado, porque sobre todo nuestros jóvenes están expuestos desde muy pequeños a una sobredosis de estímulos referentes al sexo, de una forma pobre en contenido y distorsionada, en tantas series de televisión que supuestamente no deberían ver, en anuncios que realmente muchas veces infringen los horarios infantiles, y existen ya ciertas generaciones, con una sucesión de jóvenes, que aunque disfrutan de la libertad de la democracia y toda la información disponible para gozar con su sexualidad, han puesto un listón muy alto, y lo han colocado en la cumbre de su realización diaria o del fin semana, hasta tal punto, que es en lo único en lo que piensan y llegan hasta automedicarse con fármacos, como la viagra, para durar más y quedar como unos auténticos “héroes” con sus parejas o amigos, teniendo en cuenta, que esto es muy peligroso, pues además lo mezclan con otras drogas.

Por eso, hay que cuidarse de todo este cocktail hipersexual que nos ofrecen, pues podemos acabar intoxicados de tanto cuerpo diez, como si una persona que está rellenita no pudiera disfrutar igualmente, o de tratar a los demás como meros instrumentos, sin pensar si puedes llegar a perpetrar un gran daño con tu comportamiento, pues cabe la posibilidad de hacer sentir de lo más miserable al otro con solo una mirada.

Por eso ábrete a tu sexualidad, experimenta y disfruta, alégrate y ríete mucho, goza de todo lo que te ofrece, pero cuidado, que no te coman el coco con tanta mierda envenenada y distorsionen la propia esencia del ser humano.

Está claro que en el término medio se encuentra el equilibrio, y ante todo es lo que debemos buscar en nuestras vidas y la de los jóvenes, para inculcarles que la sexualidad es más que el acto sexual, algo muy grande y muy bueno, pero que conlleva una responsabilidad, pues como todo en esta vida, se corre el peligro de perder completamente el sentido y el placer, de una de las cosas más grande que tiene la humanidad.

miércoles, 6 de septiembre de 2017

El Islam II

Una vez introducido el tema de una manera rápida, de los inicios del Islam, con mi opinión incluida, habría que entrar más a fondo en materia, para intentar responder a la pregunta, ¿es realmente esta religión peligrosa?, ¿debemos temer algo de ella?. 

En primer lugar, para aclarar conceptos, no podemos confundir árabe (persona natural de la península arábiga, alrededores o de este origen) con musulmán (creyente del Islam), pues la identidad étnica no se puede confundir con su adscripción religiosa, tanto es así, que el ochenta por ciento de los musulmanes, no son árabes, y estos, existían antes de la fundación del Islam, de hecho habían reinos árabes cristianos y también judíos.

Por tanto, lo primero que tenemos que entender es esto, para no caer en una xenofobia hacia esta etnia, aparte de entender, que personas buenas y malas nos las vamos a encontrar en todos lados. Después de decir esto, me gustaría comentar mi experiencia con la lectura del Corán, y tengo que decir, que me ha parecido densa, no por contenido, sino más bien por lo enredoso que me resultó, ya que sus capítulos están desordenados.

Hay suras que hablan sobre problemas familiares, sobre Dios, la fe y así, un poco de todo, de hecho, dentro una sura (es como se le dice a cada capítulo), hay muchas aleyas (versículos), que pueden hablar de cosas muy diferentes, por eso a veces, me perdía rápidamente con facilidad. Por supuesto, no se debería entender un versículo a la ligera, sin saber en el contexto de la sura en la que está, pues si no, podemos tergiversar el mensaje.

Precisamente, esto es algo que ocurre entre muchos imanes y creyentes, que toman las suras o los versículos como más les interesa, y no estoy hablando solo de los radicales, he tomado diferentes predicaciones de imanes, y algunos es para llevarse las manos a la cabeza. Esta semana pasada, he subido ciertos videos sobre todo esto en mi perfil de Facebook, para complementarlo.

Porque uno de los problemas de los que adolece, es que el Islam no tiene una jerarquía eclesiástica, como estamos acostumbrados a ver en la iglesia católica, está Allah y los fieles, dentro de ellos hay una serie de personas que son estudiosos y tienen digamos, ese don para promulgar las palabras de Dios. Ellos tienen escuelas coránicas, cada una con sus particularidades y entendimientos diferentes sobre sus sagradas escrituras, pero poco más, el Corán es palabra de Dios y eso no se puede tocar bajo ningún concepto. Y no todos los imanes salen de estas escuelas, pueden ser nombrados por otros imanes, que consideren a otros preparados para predicar su palabra.

Por tanto, esta religión no puede evolucionar como lo hacen las demás (incluso la judía, que tiene tela también), no se puede adaptar a los tiempos modernos, y por si fuera poco, la ley islámica (la Sharia) se encarga de manera efectiva, de que esto sea así. Con una mentalidad tan cerrada, lo que se produce es un miedo atroz entre sus fieles y una obediencia acérrima a cada palabra del Corán y lo que sus imanes digan de ella; esto es algo muy muy peligroso, ¿os imagináis que la iglesia católica siguiera quemando a la gente hoy en día, por no aceptar el heliocentrismo?, pues algo parecido.

Están estancados, y no hay una cabeza visible que pueda dar un giro de renovación a esta religión, que tanta falta le hace.

Luego, hay muchos versículos que son violentos dentro del Corán, machistas, homofóbicos y de llegar a matar si fuese necesario, si, si, señores, esto está dentro de este magnífico libro, y aquí hay muchos imanes en occidente que dicen que no, ¡MENTIRA!, y cualquiera lo puede comprobar sin problemas, otra cosa, es que estos imanes que se han hecho a nuestra forma de vida, vean aquellos versículos como algo atrasado, de un pensamiento del año de Maricastaña y no los apliquen, pero que no os engañen amig@s. 

Os dejo algunos pocos ejemplos de los muchos que hay:

El Corán dice que, el testimonio de un hombre en un juicio equivale al de dos mujeres. (Cita: Al-Bacara 2:282).

Permite que los hombres golpeen a sus esposas si la mujer es rebelde. (Cita: Una-Nísa 4:34).

También está estipulado que los hombres poseen el derecho de utilizar el cuerpo de sus mujeres como una posesión, usándolo cómo y cuándo el hombre lo desee, y donde el consentimiento de la mujer no está sujeto a discusión. (Cita: Al-Bacara 2:223).

También es muy explícito en su condena de la homosexualidad. (Cita: (Al-A’raf, 7:80-81) y (An-Nisa', 4:16).

Por supuesto, la apostasía está penada (con la muerte,) bajo la ley islámica, según se indica en la Sura An-Nahl 16:106.

Justificación para matar al infiel y referenciando a la Yihad (Cita An Nisa 4:56-57, An Nisa 4:71, An Nisa 4:89, At Tauba 9:73, etc.).

Os invito a que los busquéis y los leáis, para que veáis que no miento, y no pongo las citas porque se alargaría demasiado el post. Pero esto es muy grave y nos quieren hacer ver lo que no es, nos venden una religión llena de paz, cuando es falso, ya que viola los derechos humanos. Es curioso, porque desde hace una semana que lleva la primera publicación del Islam en el blog y en las redes sociales, la gran mayoría estaban de acuerdo, pero los agregados a esta creencia e incluso a otra, me tachaban de islamófobo, tan solo por comentar lo que conlleva esta forma de vida; conclusión, si no eres religioso, no puedes hacer una crítica en contra de ellos, puedes poner a parir cualquier otra, pero ojo, no toques el Islam porque eres un islamófobo y no tienes razón. Yo no siento ningún odio frente al Islam, ni por los musulmanes, pero tengo muy claro lo que es, y mientras no cambie, cuanto más lejos mejor.

Uno de los temas más controvertidos es la Yihad, que significa esfuerzo y es considerada por algunos sunníes como el sexto pilar de Islam. Hay dos clases, La Yihad menor, que consiste en la defensa ante el ataque del enemigo y la Yihad mayor, que es la lucha en contra de nuestro ego, defectos y bajas pasiones. Así, la defensa del Islam, de los musulmanes o de sus países frente al enemigo externo, puede efectivamente adquirir el carácter de lucha militar o guerra santa, y así se halla en el Corán, donde se anima a combatir contra los infieles si el Islam resulta atacado.

Al final, todo depende de la lectura que se le quiera dar, el problema es que puede atribuírsele una justificación porque está escrito, este es el punto de la pregunta que hacía al principio… y no se puede cambiar ni modificar, tan solo interpretar. No encontrarás en los textos de la religión judía o cristiana, el poder pegar a una esposa, pero en el Islam sí, ¿comprendes el peligro que conlleva esta religión y su rechazo a su evolución?.

Por otro lado, está la Sharia que es la Ley Divina, en el sentido de que es la encarnación concreta de la voluntad divina que el hombre debería seguir, tanto en su vida privada, como en sociedad. En el Islam, Sharia constituye un sistema de deberes que son encargados a un musulmán en virtud de su creencia religiosa; siempre ejecutados por los takzir o jueces, a los que se les da el poder de dictar sentencia, siempre que se atengan a los principios del Corán y a la Sunna (la tradición).

¿Te imaginas que hoy en día un obispo te juzgue por querer divorciarte o por cambiarte de sexo?... entonces… la llevaríamos clara. Si te das cuenta, todo esto recuerda a tiempos, que occidente ya superó, con el poder feudal y eclesiástico, pero en el Islam… todo está como siempre, como hace siglos, en un mundo evolucionado donde no puede encajar.

No quiero extenderme mucho más, pero es que esto da para páginas y páginas, por eso, para terminar, podríamos también aclarar, que no es lo mismo yihadista que musulmán, que este tipo de terrorismo lo sufren por todo el mundo en su mayoría, musulmanes y árabes en las zonas de conflictos, a diferencia de americanos y europeos en sus ciudades. Que yo pienso que muchísimos musulmanes occidentalizados, tienen una visión más evolucionada del Islam y no son para nada peligrosos, pero de otros tantos no tengo ni idea, porque ellos mismos no quieren abrirse a la sociedad, por miedo o por prepotencia.

Me dejo en el aire muchas cosas, como la unión del Islam con la política de países árabes donde todo es una pesadilla, la explotación de la mujer desde niñas (vale menos que el hombre, tienen que ir tapadas, la ablación en ciertas zonas, aunque ellos lo niegan, desigualdad porque solo pueden tener un marido, las pueden golpear, la elección de su esposo, etc.), también el hecho de que otras religiones no pueden edificar iglesias como en Arabia Saudí, ni siquiera se puede sacar una biblia, pero ellos nos demandan estos derechos en occidente (hay que tener la cara muy dura). E incluso, la culpa de los países occidentales, entre ellos España, que les vendemos armas y que acaban en manos de Isis… estando prohibido, ya que se sabe que se están violando los derechos humanos entre otras cuestiones.

Si queréis la paz, la integración y nuestra confianza, es hora que empecéis a ganárosla de verdad, ¡os animo a eso!. Mientras que los musulmanes no tomen las riendas de su religión y rechacen la violencia de sus suras, hagan una crítica selectiva de sus versículos, condenen a los gobiernos que llevan hasta el extremo el Corán, denuncien los nidos de cultivo del radicalismo en muchas mezquitas, condene el abuso de los derechos humanos desde sus propias escrituras… habrá que desconfiar de esta religión, pues realmente esconde un peligro potencial enorme, pues cualquiera puede convertirse en un maltratador o asesino, y la mecha siempre seguirá encendida…


Esta foto muestra la senda de la convivencia y la unión que debería de ser...