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miércoles, 8 de febrero de 2017

Corazón de ratón

Os voy a contar una historia muy corta que encierra mucha sabiduría:

Había una vez, un ratón que estaba siempre angustiado porque tenía miedo de un gato, entonces, un día se le apareció un mago, que se compadeció de él y viéndolo sufrir quiso ayudarlo, tocó su cabecita con su varita y lo convirtió… en otro gato.

Pero ahora, empezó a sentir miedo del perro, de modo que el mago, para que no tuviera más miedo, lo convirtió también en un perro. Luego, al poco tiempo, empezó a sentir miedo de la pantera, y el mago usó otra vez su varita para ayudarlo y lo convirtió en pantera. Pero no por esto dejó de sentir pánico, con lo que comenzó a temer al cazador.

Llegado a este punto, el mago se dio por vencido y volvió a convertirlo en ratón, diciéndole:
“Nada de lo que haga por ti va a servirte de ayuda, porque siempre tendrás el corazón de un ratón.”


Un relato muy corto que tiene un mensaje muy importante para nosotros, pues el mago entendió que no podría convertirlo en nada que le hiciera dejar de temer y ser valiente. Ese corazón de ratón, anida en muchas personas en esta vida, demasiada gente sufre por su culpa, porque siempre tienen miedo de todo, la vida les asusta y los cambios aún más.

Estas personas son las más peligrosas, ya que el miedo es capaz de sacar lo peor de ellas, es como un perro que se ve amenazado sin escapatoria, ante un intento desesperado, abrirá sus fauces y morderá para defenderse de esa agresión.

El problema es que muchas veces ese miedo no existe, no es real, son obsesiones inventadas por uno mismo, o por la histeria generada por una sociedad enferma, que cada vez más, crea este tipo de personas con ese corazón de ratón.

Gente que se cree todo lo que le dicen los medios de comunicación, que obedecen íntegramente, con miedo a preguntarse el porqué de las cosas; no tienen la capacidad para cuestionarse la validez del sistema, pues el pánico a las cosas más cotidianas los deja inutilizados, como el miedo a la muerte, a la enfermedad, a perder su trabajo, a no tener dinero, a que los demás piensen mal de ellos, miedo a no ser feliz, miedo a que los cambios que vengan sean peores, de que les ocurra algo malo, etc.

Sin embargo, siempre se están quejando de todo, pero da igual lo que les hagas, no importa lo que les puedas dar o conceder, nunca se sentirán seguros. Son las personas que quieren los políticos, los estados, una población asustada, que no se atreva a alzar la voz, a ser valientes y emprender nuevos caminos, dejando atrás el pasado; arrimando el hombro y denunciando las barbaridades que cometen los ricos, las grandes empresas, los mismos políticos y demás personajes sin conciencia alguna.

Congelados por temor a represalias, este corazón de ratón, que no importa que se convierta en un perro, en una pantera o en un cazador, pues su esencia no concuerda con su fachada, está definida por este pequeño corazón que late por sobrevivir, en un mundo tan agresivo para ellos. Y como una masa enorme, llena de confusión, pánico e irracionalidad, va arrasando siempre en dirección contraria, obstaculizando a las personas que si tienen un corazón valiente, un corazón de león.

Es igual que un mar embravecido, que aventado por los vientos de los poderosos, revuelve las aguas y los solivianta ante todo aquel, que se le ocurra cambiar este mundo, que traiga nuevas ideas para equilibrar las injusticias. Un ejército bien enseñado, sin que ellos lo sepan, para dejar esta sociedad lo más estática posible, para que unos cuantos sean ricos, otros muchos trabajen para ellos y muchísimos más, mueran sin tener opción a nada más en este planeta.

Por eso, yo te invito si crees que tienes este pequeño corazón, a salirte de ese ejercito del caos, a pensar por ti mism@, a no desear ser otra cosa como el ratón, sino que sabiendo lo que eres, te enfrentes a los problemas de la vida. A que te des cuenta de la realidad de tu existencia y seas capaz de ver lo importante de todo esto, liberándote por fin de esas pesadas cadenas de esta sociedad.

¿Acaso no tienes ganas de sentirte libre?, ¡ser libre!… total libertad en tu vida, no es una utopía, pues la libertad nace de dentro, la sientes gestar en tu ser y emana hacía afuera en forma de actos y obras que revolucionan el mundo que te rodea. Es así, como empiezan siempre los cambios, cuando ya te has liberado de tus miedos, cuando ni siquiera perder la vida, puede importante mucho si crees de verdad en un mundo mejor; pues ya sabes que por aquí, solo vamos a estar unos cuantos años, pero depende todo de ti, de lo que elijas, de lo que decidas hacer en tu vida y con los demás.

El día que puedas llegar a entender de verdad, que eres la llave para cambiarlo todo, no te harán falta magos para que intenten cambiarte, no necesitarás mirar hacia arriba esperando ese dichoso milagro. Sino que segur@ de ti, te pondrás en marcha y como un mecanismo de un reloj, empezarás a empujar engranajes, comenzarás a mover piezas y personas, que a su vez también se moverán y harán lo mismo con otras.

Así que, te lo repito una vez más, tú eliges… nadie más, entre tomar la valentía, ser adulto y desechar los absurdos miedos de esta sociedad, para cambiar la realidad de este mundo; o seguir con ese pequeño corazón de ratón, en tu jaula, girando sin sentido en la rueda, mientras esta sociedad se sigue pudriendo…


2 comentarios:

  1. Hermoso el mensaje,aunque lamentablemente la mayoría no se atreva.Algunos porque sólo le importa sobrevivir a cómo dé manera.Otros porque son indiferentes,pero la cuestión que hay muchos con corazón de ratón.Gracias a Dios,tengo un corazón de león,aunque muchas veces nos agote ir contra la corriente.

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    1. Gracias, hay que seguir luchando, descansar y vuelta a la carga.

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