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miércoles, 29 de noviembre de 2017

Dos mundos

El coche rojo se detuvo junto a la acera, delante de un paso de madera pequeño que va a la playa, del vehículo sale una mujer embarazada, con un sencillo vestido azul estampado con flores blancas y el pelo recogido con un moño también azul, tenía el semblante serio, y sujetaba un pequeño cuaderno entre sus brazos… miró algo preocupada, a una casa que estaba cerca, junto a la costa; cerró la puerta del coche y sin decir nada, bajó por el camino hasta la playa, mientras el coche se alejaba.

Al llegar Noa hasta la arena, se encuentra en una pequeña cala separada por dos espigones, a su izquierda luce esbelto, el faro del pueblo y detrás unas montañas se levantan como queriendo tomar todo el protagonismo, es un bello paisaje, son las tres de la tarde de un día de otoño, el sol luce en el cielo cálido, dando una temperatura ideal, una brisa suave recorre la playa, y el agua está en calma, tan solo se escuchan las gaviotas que acompañan a los últimos barcos pesqueros que faenan por allí.

Todo induce a la tranquilidad, ella se descalza y pasea hacia la orilla, disfrutando del olor de la espuma del mar, con las dos manos en su barriga y entre ellas su cuaderno, muy bonito, con las tapas negras, parecidos a los de contabilidad de toda la vida, pero siendo de hojas cuadriculadas simplemente. Camina despacio en dirección a la casa, pero se detiene, la espalda le duele y decide sentarse en la arena mirando hacia el horizonte azul, el sol sigue dando calor entre unas pocas nubes blancas…

A menos altura, se erige otro sol pero con un color distinto, con un tono a bronce, sin ninguna nubosidad en el cielo… la vista es impresionante desde palacio, y entonces, una puerta en el aire se abre y se agranda tapando al astro rey, aparece de ella una figura grande, alta y hermosa, nada que ver con lo que nosotros conocemos, es una reina, su faz no tiene ni ojos, ni boca, ni nada que conozcamos, es como una careta metalizada preciosa… está preocupada, mira hacia el gran ventanal, hacia el horizonte dorado y llama a su hija, que acude rápidamente; ellas se comunican sin palabras, nosotros tan solo escucharíamos susurros algo inquietantes. - ¡Princesa! -, dijo la reina, - ¡si madre! - contestó la hija levantándose rápido… - Un monstruo está destrozando mi reino, ¡ve y detenlo! -; La joven Shio, asustada, se volvió y corrió hacia afuera para obedecer a su madre, con movimientos gráciles, como los de una bailarina. 

Su mundo era algo difícil de entender para nuestra realidad, estaba en constante movimiento, piezas geométricas de diferentes tamaños se desplazaban velozmente, su suelo era un mar de estas formas, que ondeaba como el agua, del que surgían gigantescas estructuras, que volvían a hundirse velozmente. Era un sitio mágico, todo se movía y los colores eran muy intensos, en este mundo, el palacio se retorcía en el espacio a placer, sin saber si estabas arriba o abajo, pero eso no importaba, todo era muy bello… La princesa recorrió todo el palacio, que era enorme; al llegar al final de este, se encontró sin esperarlo, de cara con su enemigo, un coloso enorme, de su especie, y dos cuernos en la cabeza, estaba sentado y al instante el monstruo la reconoció, tiró una especie de pieza enorme, parecida a la figura del rey en el ajedrez, e intentó atacarle con furia; entonces el grito provocado por el coloso, hizo que Shio se desvaneciera en el suelo y tuvo una visión desconocida para ella… entre la oscuridad vio algo, eran tres seres sentados a la mesa, uno mayor que los otros dos y jugaban a una especie de juego, el mayor señalaba un pequeño objeto… estaba todo muy sombrío, tenía una sensación rara, se escuchaban risas como de niños en la lejanía, con un eco que le asustaba…

Al despertar, la criatura no estaba, entonces, apareció otra vez la puerta negra en el aire y surgió su madre descendiendo hacia ella, preguntándole, - ¿qué te ha pasado? -, - es muy fuerte madre, te he fallado -, mientras agachaba la cabeza y se incorporaba. - Hay un guerrero, un salvador escondido en lo profundo, debes encontrarlo y convencerle para que nos ayude -, dijo la reina.

Se puso en marcha, para buscar al guerrero, ella siempre obedecía rápidamente a su madre y pensó que se encontraría al norte de las tierras áridas, donde quedan unas ruinas llamadas Hika mei, que significan, el corazón del guerrero; no fue fácil, tardó dos días en llegar, hasta alcanzar una brecha, por la que se deslizó… allí estaban las ruinas y una estatua construida en su honor, dos manos abiertas, y en medio lo que parecía un corazón… Shio se acercó con su forma delicada al andar, y escuchó una voz.

- ¿Quién se atreve a entrar en mi reino? -.

- La chica contesta, - ¡salvador, ayúdame a matar al monstruo! -. 

- ¿Qué monstruo es ese? -, susurraba la voz. 

- ¡Uno que está destruyendo el reino! -.

- Ese reino ya se fue hace tiempo -, murmuraba con odio…

El salvador era muy grande en tamaño y quiso agredirla, pero al defenderse desapareció de allí, entonces, sintió algo que había detrás de los muros de las ruinas, al llegar se encontró otra vez, de repente, al enorme monstruo, luchando contra su madre, al ver a Shio, la atacó, pero ella supo cómo esquivarlo, pues sus movimientos le protegían del coloso…

La mujer sentada junto a la orilla, ya más relajada, cambió su semblante y dejó de observar el horizonte; el aire era muy agradable, bajó la mirada, abrió el libro que con tanto afán protegía. En la primera página había dibujado un castillo o una fortaleza, pasó la hoja y a la izquierda, había un dibujo extraño de un niño y un hombre agarrados de la mano, ojeó rápidamente el libro hasta el final, y volvió al principio, donde había dibujado a la derecha una especie de árbol, sus hojas eran cuadradas con colores verdes de distintas tonalidades, se quedó pensativa…

La princesa estaba en la sala del trono, y apareció el salvador, parecía tan grande y fuerte como el monstruo, podría quizás con el enemigo; este empezó a jugar con el trono, ella le dijo:

- ¿Qué estás haciendo?, no lo toques, está prohibido -.

- Puedo hacer lo quiera -, decía rompiendo sin querer parte del trono.

- ¡Mira lo que has hecho, arréglalo ahora, antes de que venga alguien! -, dijo la princesa.

- ¡Es tu culpa, tú lo hiciste! -, gritaba mientras se marchaba. 

Shio salió corriendo detrás de él, pero era muy rápido, pues daba saltos enormes, la princesa sintió que algo no andaba bien, enseguida empezó a caer una lluvia de color negro, hacía muchísimo tiempo que eso no ocurría y bien se sabía de otras veces, que estas lluvias traían malos presagios. El color de este mundo poco a poco se estaba apagando, pues la borrasca lo teñía todo, y su tierra que siempre estaba en movimiento, empezaba a reaccionar de manera agresiva, sin mucha explicación.

Al final, entre grandes bloques encontró a su guardián, estaba sentado, como cansado, apático…

La princesa también estaba harta de ir detrás suya, y le dijo:

- Entonces, ¿vas ayudarme o no? -.

- Tengo cosas mejores que hacer -, replicó el gigante, - ¡fue tu culpa de todos modos! -, dijo, retumbando todo el lugar… luego volvió a desaparecer.

Shio, desanimada, regresaba a la fortaleza pensativa, cuando se paró en seco, notaba que alguien la observaba, de repente sin comprender cómo, se encontró de nuevo con el monstruo, que intentó herirla con gritos ensordecedores, sin dejarle retornar a casa, pero ella se defendió como pudo, ahora era el coloso, el que le perseguía a ella, pero Shio conocía bien su mundo y supo despistarlo, sí, muy poderoso, pero él era demasiado grande y ella muy pequeña, para verla si se ocultaba. 

Esperó a que se cansara, y salió corriendo, sintió que más cosas extrañas ocurrían, junto a una obertura fijó su vista, algo brillaba, se estaba formando una imagen en el aire, de un destello enorme, ella cayó al suelo otra vez… 

Poco a poco comenzó a ver una imagen, estaba borroso, era un lugar desconocido, aunque inexplicablemente ya lo había visitado, otra vez aparecían los tres seres, el mayor reñía a uno de ellos, parecía una infante, sintió mucha pena de repente, el otro pequeño estaba mirando desde atrás, como asustado, había hecho algo malo, los gritos la ponían nerviosa, ¡quería salir de allí…!, luchó por escapar, y después de forcejear mucho, lo consiguió.

Asustada volvió corriendo a palacio, ¿qué serían esas visiones tan raras?... llegó al portal que siempre usaba para entrar, pero conforme se acercaba todo empezó a temblar, parecía que su mundo se iba a derrumbar, ¿qué estaba ocurriendo?, tenía miedo a caerse o a volver a desmallarse; entonces, al entrar por la puerta, de pasada observó otra imagen, esta era estática, otra vez estos seres, aunque ahora pudo distinguir algo más, el adulto no era el de antes, tenía rasgos más delicados, por lo que dedujo que era una fémina, pero no era de su especie, miraba muy preocupada a un sitio, al igual que el ser pequeño que tenía junto a sus manos, parecía un niño, ¿qué es todo esto?… Shio salió del portal y llegó a casa.

Continuará...

miércoles, 22 de noviembre de 2017

Mientras andaba…

Hace unos días estaba en el centro comercial de mi ciudad en dirección al hipermercado, para hacer la cesta de la compra. Muchas veces en el trayecto, junto a las tiendas, hay stand de diversas cosas, y esta vez estaban dos mujeres de WWF/Adena, organización muy conocida mundialmente, dedicada a la conservación de la naturaleza; que pretenden detener la degradación ambiental del planeta y vivir en armonía con la naturaleza, a través de la protección y conservación de la biodiversidad disminuyendo la huella ecológica que producimos.

El tema es que estaban allí, informando del cambio climático, de las consecuencias y me supongo que recaudando algo de fondos o recogiendo firmas, yo no tenía intención de pararme, por lo de siempre, porque no tengo tiempo, y voy corriendo a todas partes (muy mal por mi parte). Al acercarse para hablarme, yo le dije que tenía prisa, pero al ver su cara, me detuve y le dije mira yo he estado en asociaciones y muchas organizaciones, conozco bien el tema; la otra mujer me reconoció, me dijo, - ah, tú eres el presidente de la asociación de animales, esta que lo han pasado tan mal -, a lo que yo se lo afirmé (bueno, ya no soy el presidente porque necesitaba salir, pues es bastante duro). No me extraña que supiera quién soy, porque yo salía mucho en videos en el Facebook, denunciando ciertas situaciones de maltrato y abandono animal, por parte del ayuntamiento, de la policía local, la guardia civil y gente particular… vamos, lo que es un buen dolor de cabeza para las autoridades, pero la historia de esta asociación ya os la contaré más adelante, para que conozcáis las cosas que he hecho y todo lo que he vivido con el mundo animal. 

Entonces yo le explique un poco mi experiencia, fue tal el problema y el sufrimiento con una colonia de gatos abandonada, que mis videos se viralizaron (sin yo saberlo), y recorrieron prácticamente el mundo entero por la redes sociales, la gente se indignó, reprochando al culpable de todo esto, que era el ayuntamiento y a su principal cabeza, la alcaldesa; la verdad es que formamos una buena y más o menos surtió efecto, pero como os dije ya os lo explicaré algún día.

En ese momento todas las heridas de guerra se abrieron por un momento, y empezaron a escocer, la tristeza por todo lo pasado y lo que sigue ocurriendo se me quedó incrustado en la garganta y se me saltaron las lágrimas, ya he visto demasiado sufrimiento en este mundo, y sé que no es ni la cuarta parte de lo que hay.

Pero bueno, estas mujeres se quejaban de que nadie se quería parar (que mal sentó, yo tampoco quería, la verdad), realmente la gente en España y sobre todo aquí en Andalucía no está concienciada, vivimos en la edad media, ni saben, ni hay interés, ni preocupación por mejorar nuestro entorno. Me decían, son los jóvenes al ver el logotipo de WWF, los que tiran del brazo de sus padres para conocer lo que tienen que decirles respecto a estos temas tan importantes, pero los padres tiran con más fuerza de ellos y le increpaban para que sigan caminando, - se me ponen los pelos de punta -, decía una de ellas.

Y es que es verdad, los jóvenes quieren saber más, quieren ayudar, tienen una mentalidad diferente, pero los malditos progenitores… sí, sí, tú y tú también, - ¿yoooo? -, ¡qué sí hombre!, lo único que haces es envenenar la mente de tus hijos, con las mismas ideas de siempre y que provocan en este mundo lo que vemos cada día. ¿Cómo pretendes cambiar esta sociedad?, ¿para qué le dices tantas veces que hay que portarse bien, obedecer, ayudar, si luego no haces nada más?... ¿o solo se lo dices para que no te den la lata, se callen y te dejen tranquil@?. Tú, que le dices al adolescente, - estudia, busca un trabajo que la cosa esta muy complicada, lógrate un futuro, no mires por nadie y si hace falta pisa cabezas, porque hijo mí@, esta vida es una jungla y solo sobrevive el más fuerte -, ¿o acaso me equivoco?.

Frases con pestilencia añeja, pues ni siquiera sabes si tu hijo, por muy duro que resulte, se puede morir mañana. Realmente si te pones a pensar, ¿qué pretendes hacer con esta juventud?, ¿convertirla en la misma mierda en la que te has transformado, un mundo lleno de guerras, egoísmos, violencia, maltrato y devastación a los seres vivos y al planeta en general?... eres incapaz de ver lo verdaderamente importante… sí, sí, a ti la felicidad de tú hijo te importa muy poco, lo único que quieres es que antes de que te mueras, encajarlo como sea en esta sociedad, esclavo de las mismas fatalidades que las que tú vives, para quedarte más tranquil@ cuando estés en tu lecho de muerte, perdona pero eso no es amor, más bien puro egoísmo diría yo. 

¿Crees que va a ser feliz en un mundo cada vez más contaminado, que no puede soportar nuestro ritmo de caprichos, donde la naturaleza agoniza?, algo que te es totalmente desconocido, porque te da exactamente igual todo. Ni consumes menos, ni reciclas, consumes carnes, no ayudas a nadie, no salvas animales, no prestas ni una mísera limosna, no tienes paciencia con los demás (y menos al volante), no te preocupas de informarte e informar, solo críticas entre dientes, porque en verdad eres cobarde y te da miedo todo, desde enfrentarte a tu jefe, hasta con el vecino de al lado, aunque haya hecho algo reprobable delante de ti, no le dedicas tiempo a tus hijos, porque trabajas mucho para que tengan de todo y lo único que necesitan es tu amor… cosa que escasea cada vez más, por eso está todo como está.

¿Te has parado a pensar alguna vez qué es la vida?, ¿reconoces lo que es importante?, ¿sabes lo que tienes que hacer?, yo creo que sí, y además sabes lo que tendrías que decirles a tus hijos o sobrinos. Ellos están esperando con impaciencia que les cuentes no solo tu experiencia, sino que les ayudes a hacer las cosas de una manera diferente; déjate ya de comentarle estupideces, de esclavizarlos y engañarlos bajo un manto de hipocresía, no le metas en la cabeza las mismas tonterías que tienes tú… escucha, háblales de la realidad, pero sobre todo, rellena su mente de amor, en la familia, a los demás, a la naturaleza y a todo ser vivo.

Que aprecien el brillo de la vida, que la felicidad se encuentra cuando ayudas a los demás,  que hay que romper con todo, hazles entender que un mundo nuevo es posible, y en sus manos queda esta maravillosa obra. Libres de ataduras, de religiones, tradiciones, de normas estúpidas, modas, banalidades, envidias, y tanta morralla que crece junto a nuestro alrededor... por nuestra culpa... y con la que asesinas a millones de seres vivos todos los días, tú, tú, asesino, tú eres un/a asesin@ de niños, de adultos, ancianos, de animales y del planeta… maldit@ seas siempre.

En vez de robarles el futuro a los jóvenes, tómales de la mano y muéstrales las posibilidades infinitas del universo, enséñales a ver que no hay más limitaciones que las que ellos quieran.

…y si ni siquiera has entendido esto que te digo, o crees que no va contigo y que eres mejor que todos… la verdad, no tengo nada más que contarte, seguramente solo habré perdido el tiempo un día más…

Saludo a estas dos mujeres de WWF por la labor que hacen, gracias por ser diferente.


miércoles, 15 de noviembre de 2017

De otra manera

“Antes quería salvar el mundo, este bello lugar, pero… que ilusa era entonces, es una tierra de magia y fascinación, digna de ser amada sin reservas, pero cuanto más te acercas… más vislumbras la gran oscuridad que encierra. Y la humanidad (sonriendo tristemente)… la humanidad merece un capítulo aparte, lo que uno hace al enfrentarse a la verdad es más difícil de lo que pueda parecer, yo lo aprendí a la fuerza, hace mucho, mucho tiempo… y ya jamás volveré a ser la misma.” 

Así empieza una narración de una diosa, en una película que estuve viendo el otro día, y estas palabras me hicieron reflexionar, sobre la vida, sobre mi experiencia vivida en estos últimos años. Me pareció un tema muy interesante, ya que creo que más de un@, se sentirá identificado con todo esto.

Aunque es con los dieciocho años recién cumplidos, cuando a una persona se le considera mayor de edad y por tanto adulta, la verdad es que es imposible ser maduro en tan pocos años, pese a que sea una mente maravillosa, buena o educada, aunque haya sufrido lo indecible y con ello aprendiera más rápido, una parte de la realidad de este mundo. Es necesario más tiempo para poder forjar a base de dolor y placer, de alegrías y sufrimientos, una experiencia mínima como para ser totalmente consciente de las reglas del juego, en el que estás metid@ sin tu consentimiento; por mucho que las generaciones aprendan más rápido gracias a internet y las nuevas tecnologías, hay cosas que siempre requerirán diferentes etapas en el tiempo, que disipen las distintas cortinas de humo, que esta sociedad te tiene preparada…, y eso… el que llegue a descubrirlas, pues muchos se quedan en el camino, bien por ignorancia, pereza o incluso adrede, para intentar esquivar absurdamente la cruda realidad. Esa, con la que algún día, más tarde o temprano, se dará de bruces contra él y lo devorará en el pánico más horrible que se pueda conocer, pues no se ha interesado, y la faz de la Parca, transforma la cara del hombre más prepotente y seguro, hasta reducirlo a cenizas en pocos segundos.

Es cuando estás sobre los treinta, que comienzas a darte cuenta del agujero en donde vives, y compruebas de verdad, que la inocencia la perdiste por el camino de los adultos hace ya tiempo, prácticamente sin querer y sin darte cuenta. Al caerse el telón, la mayoría no hacen nada para cambiar, sin embargo, otros, intentamos revertir el proceso, y restaurar todo lo que hemos destruido, deshacer lo que nunca debió pasar… pero cuanto más énfasis le pones, más se levanta el sistema, no ya la administración y los políticos, sino la gente que te rodea, tus compañeros de trabajo, tus amigos e incluso tu familia, de aquellos de los que nunca lo hubieras imaginado, para que todo siga igual, ahogando toda esperanza, como si esta sociedad se comportara como auténticas arenas movedizas… al final, llegas a una conclusión aterradora… estas sol@ en este intento y solo puedes contar contigo mism@.

Después de esta experiencia, al ver que no se puede desandar lo andado, que ya nadie quiere empatizar y el daño ya está hecho, solo queda la solución de mirar al presente y cambiarlo para construir un futuro mejor, poner todas nuestras fuerzas en modificar nuestros malos hábitos en singular, que tanta muertes en plural traen diariamente. La idea de salvar al mundo se desvanece, ya no quieres ser un héroe, ni siquiera lo intentas, pues no es cuestión de convencer a nadie con palabras, sino con tu propia experiencia de vida, sin que tu atisbes, si los demás te siguen o no. 

Año tras año, recibes palos, y más palos, para disuadirte de esta idea, oscurecer tu horizonte, para que solo pienses en ti y nada más, pero cuanto más sufres, más fuerte te haces y también más sabi@, pues eso es lo que hace el tiempo en las personas... por lo menos en algunas. Has entendido que esta guerra se libra sola, que los frutos de tus buenas acciones no los verás en su plenitud, pero están ahí y algún día florecerán, para hacerle entender al mundo, que no vas a tirar la toalla JAMÁS, y que continuarás mientras te quede un soplo de vida, aunque vayas sol@, pues creo en lo más grande que tiene el ser humano, el amor y la compasión, estas, algún día moverán el mundo y como si fuese un virus, ya nada las podrá detener.

Este es mi credo, esta es mi forma de vida, no sé si estaré equivocado o lo haré bien, si solo es una mera utopía, y sé que no soy un superhéroe, pero sin duda, lo pienso y… ¡ey! merece la pena morir por esto, ¿no te parece?, es nuestra elección personal.

Por eso para terminar, te animo a que no te conformes ante lo que tus ojos ven, no creas que la naturaleza del hombre solo es la destrucción, es verdad que ha sido duro, pues empezamos con una manera de pensar hermosa, y la crueldad del ser humano, ha quedado tatuada en nuestras espaldas, como si se tratara de mil latigazos, a cual más doloroso. Pero ya hemos cambiado, no somos los mismos que al principio y hemos entendido en su totalidad que debemos hacer, sin necesidad de tener superpoderes.

Acabo el post con las palabras de esta diosa, que aun llena de poder, también comprendió sus limitaciones en esta realidad: 

“Antes quería salvar el mundo, acabar con la guerra y devolver la paz a la humanidad, pero entonces vislumbré la oscuridad que vive en su luz, y aprendí que dentro de cada hombre, conviven ambas… es una batalla que cada uno ha de librar en solitario, algo que ningún héroe jamás derrotará, y ahora sé… que solo el amor puede salvar el mundo, así que me quedaré luchando y me entregaré, por el mundo que puede llegar a ser, esta es mi misión ahora… ahora y siempre.”

miércoles, 8 de noviembre de 2017

La pieza que falta

Veo en esta sociedad tan diversa, cantidad de personas, cada una con sus vidas, con sus historias, y a veces parece que lo único que nos une, es la especie de dónde venimos, porque por lo demás llegamos a ser tan distintos, siendo iguales… que me cuesta reconocer que tengamos algún interés común o brille en nosotros algo de empatía hacia los demás. 

El trabajo nos ocupa la mayor parte de nuestro tiempo, y el poco que nos sobra, lo dedicamos a algún hobby, a una actividad concreta u otras cosas que nos gustan. Un@s lo dedican a jugar a los videojuegos, otr@s cuando llegan a casa siguen trabajando sin desconectar, algún@s se dedican al deporte por entero, otr@s a navegar por internet, las manualidades o el bricolaje, también el cuidado de animales, aquell@s a las compras compulsivas, otr@s a delinquir, algún@s solo buscan hacer dinero, meterse en la política para conseguir poder o simplemente pasan el tiempo viendo la televisión sin pensar en nada… 

Una variedad casi infinita, en donde ponerse de acuerdo, no entra ni por asomo en la mente humana… pero entre tanta diferencia, si hay un punto en común, todos tenemos algo que nos une de una manera inconsciente e inevitable, es como una pieza de puzle que falta en nuestro interior y que nos descoloca. Una pieza nunca hallada, nunca encontrada por el hombre, ni siquiera sabemos si existe o no, pero sería un alivio poder colocarla en este hueco tan importante, pues sincronizaría la manera de actuar de las personas. 

Te preguntarás - ¿qué pieza es esa…? -, pues es una incertidumbre, una semilla invisible que no germina, una cuestión que nos atormenta la mayoría del tiempo sin darnos cuenta. Algo tan sencillo como no saber para qué estamos aquí, una simple idea que nos tiene en vilo y descontrola esta sociedad, desvirtuándolo todo, llevándola al más absoluto caos, en donde la vida no se aprecia y nos inventamos realidades paralelas, para no aceptar esta gran duda. Si supiéramos de verdad que hacer en cada momento, todo sería diferente, muy diferente, pues hasta el hombre que se cree más prepotente, cae ante esta incógnita y se pierde totalmente, vagando entre miedos y egoísmos.

No a todo el mundo le gustaría ser su propio jefe, ya que conlleva a veces demasiadas responsabilidades, pero aparte de eso, ¿a quién no le gusta que en su trabajo, por ejemplo, le digan lo que tiene que hacer?, yo hago esto y aquello, ocho horitas, para casa y al final de mes cobro mi nómina… las preocupaciones para los que manden. En todo momento queremos saber qué tenemos que hacer, pues es muy cómodo, nos da confianza en que no nos equivocaremos y si lo hacemos, alguno se encargará de arreglarlo; una vida en donde no tengamos que dudar, que no exista miedo al fracaso, a saber siempre que estamos haciendo lo correcto y que contribuyamos al desarrollo de la sociedad, para un mayor bienestar de todos. 

Pero desgraciadamente, esto no es así, y todo queda sujeto a la libre interpretación de las personas, de manera que para unos, una cosa puede ser buena y para otros es lo contrario. Un tira y afloja, un construir para luego derribar, una especie de ying y yang descontrolado e imposible de dominar pues somos demasiados complejos y numerosos; sin contar, los engaños, mentiras y controles a los que nos someten los poderosos (políticos, religiosos, banqueros, empresarios y gente de las altas esferas), que hacen totalmente imposible caminar todos hacia un mismo sentido, para evolucionar a algo más grande, a lo que todos ansiamos, pero no conseguimos a pesar del paso de los siglos… 

Es verdad, la incógnita está ahí, y el libre albedrío creo que es demasiado bueno para nosotros, y al no saber usarlo correctamente, nos hace un flaco favor a la humanidad y al planeta entero. Pero no es menos cierto, que aunque la pieza no está, no se trata de buscarla ni sufrir por ello, quizás como raza superior debemos fabricarla nosotros mismos, tenemos ese potencial, porque cada uno presenta una diversidad diferente y la pieza ha de ajustarse a cada uno en particular. 

Por eso deja de rastrearla, no está en la política, ni en las religiones, ni en el trabajo, ni en la familia, tampoco en tus hobbies, ni en ningún sitio… a tenor de tu experiencia, y de los hábitos positivos, todos sabemos lo que es justo y/o correcto (básicamente al menos), la empatía vivida con los demás, y el descubrir de que no todos los seres vivos en este mundo lo están pasando bien, la necesidad de cambiar tantas mentiras y tradiciones malignas que nos retrasan en nuestro cambio hacia un mundo mejor, odiar todo lo que hacemos mal enseñado por nuestros propios padres… nos dará la clave, el molde, para fabricar esa pieza, que aunque no sea la ideal, es con la que todos soñamos, así aprenderás a saber, qué es lo tienes que hacer en cada momento, a tener la seguridad y la satisfacción de ser un adulto de verdad, para asumir responsabilidades, ayudar y cambiar los hábitos diarios, los que los jóvenes deben ver en ti, para que todo se renueve por fin. 

Es horrible notar todo esto en la cabeza y no saber encajar la última pieza, ¿qué tienes que hacer tú?, ese sin duda, es el gran rompecabezas… ¿Cómo te puedes olvidar de esto que acabas de comprender, y luego te pasas días enteros disfrazándola de tu memoria, y después, las noches dedicarlas a intentar reconstruir este maldito puzle una y otra vez hasta el amanecer?, ¿es qué no te cansas?... ¿cuándo comenzarán tus cambios de verdad?, ¿cuándo colocarás esa dichosa pieza que te falta?...

miércoles, 1 de noviembre de 2017

Tradiciones

Según la Real Academia Española, las tradiciones se definen como la transmisión de noticias, composiciones literarias, doctrinas, ritos, costumbres, etc., hechas de generación en generación, y conservadas en un pueblo de padres a hijos. 

Hay muchísimas tradiciones buenas, culturales y de todo tipo que nos recuerdan de dónde venimos y qué raíces queremos conservar de cara al futuro; pero en ningún momento en la definición, distingue entre buenas o malas, entre tradiciones dañinas o que causan un efecto positivo para la vida y la sociedad en general.

Es curioso que esta palabra siempre tenga como una connotación alegre, agradable o beneficiosa para una comunidad de personas, y eso me llama la atención, pues ahí se ve lo atrasados que estamos todavía, ya que, o la definición está incompleta, o si se considera siempre como algo positivo en nuestro pensamiento, entonces, la mentalidad del hombre del siglo veintiuno no es como debería ser…

De las tradiciones que no influyen negativamente, que respetan la vida, y hacen un bien, poco tengo que decir; que sigan adelante y a disfrutarlas todos por muchos años.

Pero lamentablemente, en el mundo, hay miles de tradiciones salvajes, de gente que conserva una mentalidad de la edad media o más retrasada. En este post me centro en algunas de las muchas que hay en España, y que son realmente horribles, en donde la sangre, como vampiros, es lo único que puede llegar a divertirles, con tal sadismo, que pone los pelos de punta. Entre ellas se encuentra por excelencia las corridas de toros, de la que ya dediqué un post y que te recomiendo que leas, en donde de una manera bestial, unos psicópatas maltratan a un toro con malas artes, jaleado por otra cantidad enorme de anormales, cual circo romano, que piden SANGRE, DOLOR y MUERTE.

Si hablamos del toro, ese animal que representa a este país (tan querido y famoso), podemos encontrar al toro de la vega, en Tordesillas (Valladolid), en donde sueltan al animal por las calles, lo persiguen y maltratan, hasta conducirlo a la vega de río Duero, donde unos picadores y lanceros lo revientan (literalmente) hasta su muerte, bonita tradición si señor… hace dos años, debido a la presión de los animalistas, se prohibió lancear al toro y matarlo en público, pero la realidad es que al final no se sabe bien lo que le hacen al pobre animal y cómo muere, porque matar, lo matan. Este pueblo, lleno trogloditas e idiotas sanguinarios, siguen pidiendo que se le claven lanzas al toro hasta matarlo, como "antes", como manda la tradición; gente mierda, que deberían clavarse ellos las lanzas por algún agujero profundo y desaparecer de este mundo.

Fiestas asesinas en España sobran, en Aragón, Andalucía y Castilla y León (catalogado de interés turístico), está el toro enmaromado, como por ejemplo en Benavente (Zamora), en donde atan una cuerda al animal por el astado y es arrastrado por la ciudad, provocándole desgarros en el cuello y por supuesto, empujones, patadas y demás, luego, ¡cómo no!, se sacrifica, pues si no estos simios (con perdón por nuestros antepasados animales), no descansarán tranquilos y no dormirán esa noche en paz. De esa cuerda os colgaba yo uno a uno, para que sintierais el pánico y el dolor más extremo.

Otra son, los toros embolados, en toda la comunidad de Valencia y Cataluña (en más de 100 municipios), en donde ponen en los cuernos del animal unas antorchas encendidas o pirotecnia, atado a un pilón, y nada, pues es muy divertido ver como el toro asustado se va quemando, mientras le pegan patadas, le tiran del rabo, etc., pero dicen que no sufre… verdaderos salvajes, cientos de personas que van a este espectáculo lamentable, desde niños a viejos, organizado por el ayuntamiento de turno... yo alucino, ¿y las leyes contra el maltrato animal?, ¿dónde está la justicia?, ¿qué hace la Policía y la Guardia Civil?, nada, como siempre.

España país de enfermos, cobardes y asesinos que solo disfrutan torturando animales, justificados por tradiciones con una solera decrépita llena de maldad. Una ameba tiene más sentimientos que todos estos psicópatas.

O por ejemplo el correr de los gansos en Carpio del Tajo (Toledo), en donde en honor al apóstol Santiago, se cuelga un ganso en una cuerda boca abajo, y ahora un cazurro (bueno, muchos), se acercan velozmente en un caballo, para tirarle del cuello y arrancárselo… si lo consigue es el más listo del pueblo al parecer; desde 1983 debido a la presión mediática, el animal ya lo colocan muerto, pero aun así, ¿de verdad que hay matar gansos para divertirse así?, asquerosamente horrendo, gente basura, para un pueblo de mierda, totalmente podrido.

El apedreamiento de Judas, en donde el Domingo de Resurrección, atan un muñeco a un poste, con una serie de tinajas a sus lados, que los pueblerinos de Robledo de Chavela (Madrid), rompen con piedras, el tema es que dentro metían animales, gatos, ardillas, etc., que morían de la forma más agónica, lógicamente. Ahora en los recipientes ponen papelillos, ¡ah! pero, también palomas que se crían en la torre de la iglesia, que naturalmente muchas de ellas acaban muertas. Una vez más, los españolitos y sus fiestas de sangre y borracheras.

También podemos nombrar la fiesta del cordero aquí en España, en donde se sacrifican miles de ellos en el rito islámico de Eid al Adha, una fiesta familiar preciosa en donde enseñarles a los niños el desprecio por la vida, parece necesario; ¡hey, musulmanes!, a matar animales a Arabia Saudita o a la India, que ya no es necesario desangrar lentamente a un cordero para comer y menos en honor a un Dios; malditas religiones, siempre igual. Y lo mismo digo con las matanzas caseras de tantos pueblos en España, verdaderos bestias.

Y así hay una larga lista de fiestas, como patos al agua en Sagunto (Valencia) donde los maltratan y ahogan, el encierro del pilón de Falces (Navarra) donde (incitándolas) tiran vaquillas por los precipicios, el correbous en Valencia y Cataluña, donde muchas vaquillas mueren ahogadas para diversión de la gente, por supuesto la mierda de San Fermín, la fiesta de las luminarias en San Bartolomé de Pinares (Ávila) donde pasan a los caballos por hogueras para purificarlos, etc., etc., etc. Sin hablar de los malditos cazadores o las miles de romerías en donde tantos animales mueren reventados, como pasa en el Rocío.

Como la cantidad de fiestas en donde se tiran toneladas de verduras, comida, agua y bebidas, que quedan desparramadas por los suelos, mientras los pobres que viven en sus esquinas se mueren de hambre... unos desgraciados ignorantes que cometen un crimen contra todo el que pasa necesidad.

Señores esta es la bazofia del país en que el que vivo, en donde miles de personas salen a la calle para torturar y matar a animales, que lo único que quieren es vivir como cualquiera; lo hacen con saña, con risas y alegrías propias de dementes, llenos de alcohol por supuesto, apoyado por las religiones (y su gran amor de dios) y las putas administraciones que se pasan por el forro, la derechos universales de los animales y las propias leyes contra el maltrato animal. ¡Maldita España!, ¿es qué todo lo haces mal?, ¿por qué los animales tienen que sufrir una vida de tormento, abandono y de crueldad, para el recreo de muchos?.

No es propio de seres humanos de esta nueva era, que sigan con tantas tradiciones de siglos atrás, en donde pensaban que la tierra era plana. Para todos los animalistas, vegetarianos, veganos y gente con sentido común, os animo a resistir tanto dolor y a luchar para que de una vez por todas estas tradiciones caigan, y el hombre no tenga que masacrar a un animal para pasar el rato; que los niños no vean más asesinatos y sean libres, en un mundo donde se cuide y se respete toda clase vida, para llegar a vivir en armonía y no condenar a la juventud con los mismos crímenes que esta bazofia comete cada año.

España, mira que me gusta tu clima y tu tierra, pero cada vez, odio más a los humanos que en ella habitan… Extranjeros no vengáis a este país, está podrido en todos los sentidos.

Mirad la España del sadismo, tanto del catedrático que está tirando del ganso, como los incultos que miran con ganas de sangre.